๑

- Capítulo 1 -

Un leve fulgor blanco pestañea en la nada.

Una sola vez,

nadie lo nota.

El frío,

el silencio

y la calma.

La calma,

sí...

La calma está bien.

Un segundo fulgor,

diminuto.

Aún, nadie lo nota.

No,

nadie puede.

...

¿Cómo podrían?

...

¿con este...

este frío...?

...

๑: e⑈… ғ-fⱤ▒Ø%?

Eso es algo que,

bueno,

algo que nadie puede ignorar.

Sin embargo, un tercer fulgor,

como un pestañeo en la noche.

Esta vez,

un poco menos ínfimo.

...

Le temes al frío, de hecho...

Pensé que debías saberlo.

...

Un cuarto pestañeo.

Acompañado del más leve de los sonidos.

...

Un quinto pestañeo, un poco más brillante,

mucho más notorio.

y de repente...

Y sin más, el frío reclama su cuota,

Te exige,

cala.

...

El pestañeo se detiene.

---

- El Mecánico -

Una bocanada de aire que condensa el visor revela vida al interior del traje.

? : ¿D-dónde estoy--?

está... muy...f-fri--

...

...Iris, ¿Q-qué, acaba de p-pasar?

A un costado, una ventana de comunicación abierta, se apaga y se prende nuevamente.

//CORRUPT: IMPOSSIBLE TO ANSWER // Code: 0.SPCS

//Soporte vital al 15%...

Intenta fijar la vista, pero la inconsciencia lo mantiene cegado.

Con la mano intenta limpiar parte del visor, sin suerte aparente, ya que no sucede nada.

? : ¿D-dónde?

El destello rojo a un costado hace doler sus ojos, entre las náuseas y la confusión, aparece un círculo con un símbolo que reconoce a un costado de la ventana de comunicaciones, de manera automática lo presiona con su vista.

? : Comando, reporte, s-sufrí una especie de... de desmayo. Requiero asistencia in-inmediata--

Sus palabras se mantienen flotando en el aire un segundo, atrapadas junto a él en su traje. La confusión se transformaba en impotencia, esto estaba mal.

J: C-comando, reporte-- soy Joshua, ¿M-me copian?

...

¿Alguien...?

Desde la otra línea solo se escucha estática.

J: Oh, vamos...

Una débil voz robótica suena en el comunicador.

Iris: Mecánico sección Q01, Joshua Foster, los indicadores señalan que su sistema vital ha sido gravemente comprometido. Existen 23 factores de alto riesgo actualmente, por favor retome su camino de vuelta a la nave, de forma inmediata

Detrás de la monotonía robótica podía discernir trazos de autoridad mezclados con preocupación.

J: ¿g-grave? ¿qué--

Iris: Mis indicadores señalan un máximo de 4 minutos y 45 segundos antes de que la totalidad del soporte vital falle. La ruta de retorno está siendo señalada.

Una luz es emitida de forma intermitente desde Joshua hacia adelante, siguiendo el cable acerado que lo mantiene flotando en paralelo a la nave, a un par de cientos de metros.

Joshua aun perdido en la oscuridad de su propio espacio, comienza a recuperar sus sentidos.

J: ¿s-soporte vital? pero s-si acabo de...

Iris... ¿c-cuánto tiempo llevo a-aquí afuera?

...

¿Iris...?

...

¿D-dónde están t-todos?

Nuevamente se abre una ventana de comunicaciones en su visor, esta vez bastante más clara.

//CORRUPT: IMPOSSIBLE TO ANSWER // Code: 0.SPCS

//ACCESING: LOG-D885 // REGISTRO AUTOMÁTICO RASHIDA//1144

//AUTO: SUSPENDIDO

//ALERTA: CODIGO CQ = R-001 // CUARENTENA ROJA

Sin entender ni una pizca de lo que había leído, Joshua intenta mover sus brazos y piernas, no parecen estar paralizadas, pero duelen como si hubiera estado enterrado en nieve por semanas. Su cuello responde bien, en cambio.

Ahora sería capaz de saciar el curioso morbo que presionaba en su pecho y, al mirar a su alrededor, se vuelve evidente su situación.

Un brillante resplandor aparece en su rango de visión,

la baliza de emergencias había sido encendida.

J: ¿¡C-cuarentena!?

Joshua se encontraba en medio de una catástrofe. Partes y trozos de la nave flotaban libremente a su alrededor.

Iris: El análisis de los registros señala una pérdida de conciencia poco después de salir al exterior, causada por una baja significativa, pero breve, de oxigeno en su traje.

Los motivos de la falla son desconocidos.

//Se sigue buscando información adicional...

J: ¿...15 d-días?

Iris: 13 HORAS 23 MINUTOS. Comando requiere su inmediato regreso a la nave.

Por favor, proceda, Joshua Foster.

J: eso quiere decir que--

...

¿d-dónde están...todos--?

Una débil alarido de estática llena parcialmente las bocinas del comunicador.

Iris: La ocupación actual al interior de la nave es desconocida.

No tengo permitido mirar, algo está interf!r̵̛̳̤̊f̴̥͔͋̇͜%&d҉҉***%=#o҉-------

Un agudo retorno sonoro ahoga el espacio, reactivando dolorosamente los débiles oídos del mecánico.

J: ¡AGH!

Instintivamente intenta cerrar sus oídos con sus manos, pero se encuentra con los costados de su duro casco.

J: ¿¡q-qué diablos fue eso...

...¿¡Iris--!?

Un enorme trozo metálico pasa a toda velocidad cerca de Joshua, a punto de rozarlo fatalmente.

J: ¿¡HUH!?

¿¡QUÉ--!?

Reaccionando, en su pánico, logra sujetar firmemente el cable acerado. Un segundo trozo metálico, más pequeño, se atasca en su lugar, propulsando a Joshua a una velocidad desmesurada.

J: ¡AAH! ¡OH, DIOS!

Después de unos segundos, el enorme bulto sigue su curso, soltando la tensa línea.

En el mismo movimiento y trazando un abanico, el mecánico es lanzado, girando descontrolado, hacia cualquier lugar. En el fondo, a un costado completamente expuesto de la nave, se dibujan habitaciones destrozadas, pasillos desiertos y contenedores cuyo contenido ya no podrían ser recuperados.

En el vacío del espacio, en medio de la nada, una filosa astilla flota, quieta, en su lugar.

J: ¡IRIS! ¡N-NO PUEDO--!

Estática, ruido blanco.

Los llantos y alaridos del mecánico son ahogados por el implacable poder de la inercia.

Avanzando, metro por metro, a milésimas de segundo cada vez.

J: ¡N-NECESITO AYU--!

¡AAH!

El amenazante trozo metálico posaba estático, superior y poderoso ante la impotencia de Joshua, quien se dirigía, en una ignorante espiral, en su dirección.

J: ¡IRI-I-I-I-ISSS!

Sudado, gritando, flotando entre líquidos de distinto tipo, Joshua se acercaba a su inevitable destino.

J: ¡OH DIOS!

Una ráfaga de oxígeno detiene súbitamente al mecánico, quien queda a centímetros de ser empalado.

Iris: // Sistema de amortiguación de inercia: ACTIVADOS

// Auto-nivelación: -144 km/h

Joshua Foster, para usar los amortiguadores de inercia se necesitó el 90% del oxígeno restante en su estanque, existen múltiples fallas en el sistema de alimentación, es imposible suministrar más.

// Tiempo de descarga total: <1 minuto

Los empapados ojos del mecánico se tardaron un segundo en dejar de girar y vibrar, y cuando lo hicieron, Joshua logra tomar una pequeña bocanada de aire, manifestando una arcada y acompañado inmediatamente por los repugnantes sonidos del vomito.

J: ¡Agh!

Y termina de escupir dentro de la boca de un receptáculo frente a su cara.

J: ¿¡Qué mierda está sucediendo!?

Iris: Hablar y jadear consume oxígeno, debe abstenerse.

La línea de fijación está intacta y lo lleva directamente a la puerta del ala sudeste de ingenieria, Q01, su puerta, mecánico.

Recuerde respiraciones cortas y controladas.

Proceda con precaución...

Joshua toma la línea e rápidamente presiona el botón en su cinturón, tensandola nuevamente al enrollarse en un carrete donde está enrollada. En su camino de vuelta, se comienza a fijar en algunos detalles en la nave, las habitaciones destrozadas, los pasillos abiertos de par en par, no puede evitar sentir una aterradora curiosidad.

Iris: La nave sufrió una especie de avería en su curso de vuelta a la tierra, // la causa sigue siendo analizada...

J: ¿¡Qué clase-- qué clase de avería causa que la mitad del casco de la nave se desprenda de esa forma--!?

Iris: Debo instarlo a abstenerse de hablar nuevamente, Joshua Foster.

Es por su propia supervivencia.

Debe mantenerse vivo.

A medida que el mecánico avanza, tomando la línea y arrastrándose a si mismo por el vacío hacia la nave, esquivando cosas que flotan por doquier. Gotas de sudor corren por su rostro, mientras se pregunta como sobrevivió tanto tiempo ahí fuera, inconsciente.

Parecía un milagro, de hecho.

Iris: Es el primer tripulante que responde mis mensajes después ser instaurada la cuarentena. No puedo recopilar información del interior de la nave en estos momentos, los sistemas están siendo bloqueados.

Una mirada vacía se apodera de la cara del mecánico.

J: ''¿Un ataque?'' Piensa para sí mismo.

''nada de lo que transportamos tiene valor--

diablos, apenas conseguimos datos nuevos en ese asteroide...

¿¡Qué diablos está sucediendo?''

Iris: Escuche mis consejos desde ahora en adelante, Joshua Foster.

Retomar el control de la nave es imperativo.

Su supervivencia debe ser absolutamente asegurada. Nada más importa.

Por su vida y la del resto de la tripulación, debe resistir,

mecánico.

Meneando ligeramente su rostro, descubre que el dolor de cabeza sigue ahí, sin embargo, logra quitar las gotas de sudor frío que tenía en sus ojos. Suspira suavemente, abre una ventana y presiona unos botones en su visor, y continúa su camino. Luego de unos minutos recogiendo la línea, logra balancearse a un costado intacto de la nave y engancharse al metal del casco con sus guantes imantados. Toma un segundo para saborear la estabilidad que su cuerpo le pedía a gritos, y respirar. A un costado suyo flota un particularmente masivo trozo de... madera rayada con líneas y recubrimiento interior. El suelo y otras partes del gimnasio, si tuviera que adivinar.

Luego de unos segundos, la ventana en su visor brilla con una luz amarillenta.

Iris: Activó el panel de retroalimentación magnética, muy astuto.

// Debería tener suficiente carga para lo que queda de recorrido...

3 minutos extras, nada mal.

J: No siento mis piernas... Iris...

Necesito... un empujón...

Iris: // Escaneando...

¿Se refiere a...?

//...

Un shot de adrenalina solo dañaría sus ya atrofiados músculos, no es recomendabl--

J: ¿T-tienes una mejor i-idea?

//...

Iris: No.

// Inyectando 0.3 de epinefrina.

Le dí lo que quedaba en su traje.

El mecánico toma una larga bocana de aire. La carga en su batería le permitió renovar el oxígeno en su traje y vaciar parte de los contenedores de desechos, no era mucho, pero se sentía bien.

Al soltarlo, lo hace suave y susurrante, como saboreando.

J: Hiss...

...Augh...

...

Está bien, vamos.

Joshua avanza con esfuerzo, su mente intentando distraerse del frío y el dolor.

La puerta de ingeniería se perfila en la distancia, un recuerdo fugaz cruza su mente.

J: La puerta de ingeniería...

Sus dedos se tensan en el cable acerado, sus movimientos ralentizándose.

la puerta... es lo último que recuerdo

no parecía haber nada fuera de lo normal,

después de este turno en orbita le tocaba descanso, encima.

Teniendo frente suyo el metal del casco mientras avanza, se cruza con paneles, placas y cableado suelto, mientras deja su mente vagar durante el ejercicio.

Su voz, débil, se pierde en el vacío. Toca el metal del casco mientras atraviesa restos de paneles y placas, su mente regresando a esa conversación con Tom.

J: ''Mejor yo que él, en todo caso.''

Pensó por un momento, recordando.

J: ''hay cosas y... y hay...''

El pensamiento le arranca una amarga sonrisa, hasta que algo lo detiene en seco.

Frente a él, una ventana al interior de la nave. Tal vez, dada su situación, no debería sorprenderle, pero había algo.

Había... alguien.

J: T-to--

Tras el cristal, una silueta.

El cuerpo de un miembro de la tripulación flotaba en la habitación, inerte.

Una mirada vacía, si podía llamársele así, que carecía de ojos, con dos cuencas negras, rodeadas de líquido negro, piel quemada y pequeñas larvas en su interior, ocupaban su lugar.

No se movía, pero al poner atención, logra notar algo brillante en sus "ojos" que le observa fijamente.

J: ¿Q-quién?

Los ''ojos'' de la figura parecían reaccionar a las palabras del mecánico. Lo seguían.

Descuida la mirada para continuar con su camino.

Toma aire y, por última vez, echa un vistazo fugaz por la ventana.

Unos cables chisporrotean sobre Joshua, lo que lo obligan a moverse.

Se desliza ágilmente y logra pasar la zona expuesta. A esta altura ya debería estar a unos metros de la puerta.

Sin embargo, sentía algo nuevo en el pecho.

Algo que inflaba dolorosamente sus pulmones y lo llenaba con otra clase de pánico.

Su mente parecía repetir ese momento una y otra vez,

ese vistazo fugaz.

Por un segundo había parecido como si el cadáver hubiera cambiado su expresión,

le sonriera, con dientes podridos, en una mueca de burla y desprecio.

Sus ojos, siguiendo sus movimientos, atento a los cambios, estudiándolo.

Para, finalmente, desaparecer,

sin dejar rastro,

justo frente a sus ojos.

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